Así, a primera vista, no parece nada complicado, ¿verdad? Pues nada más lejos de la realidad; al menos, en mi caso. Nunca he tenido excepcional contacto con el arte sonoro, y se me hacía completamente ajeno y extraño todo el tema de tratar de crear yo misma una pieza sonora.
De manera que me terminé decantando por la opción que más me gustó, que mejor pude entender: la pieza "Ruido Secreto" de Marcel Duchamp, que
Esta obra consiste en una pequeña estructura, dentro de la cual se ha incluído un objeto que incluso el creador desconoce (éso es lo que se dice, al menos; a mí me parece extraño que no lo sepa. Cómo la construyó, ¿con los ojos vendados?) que, al ser agitada la estructura, suena. Me pareció una buena opción dentro del arte sonoro, dado que el sonido en sí se me hace difícil considerarlo arte (a menos que se trate de música, pero éso ya es meternos en otros asuntos y discusiones diferentes); y al tratarse ésto de un objeto físico, que se puede palpar y que, de hecho, hay que tocar y mover para que suene, se me hacía más fácil considerarlo "obra" o "pieza sonora".
El proceso fue sencillo, una vez decidido qué hacer:
Materiales: planchas de aluminio, tuercas, varillas roscadas, madejas de hilos y elementos que meter dentro para que suenen (que mantendremos en secreto, para darle emoción al asunto).
Las madejas de hilos se colocan entre las dos planchas, y con las tuercas se sujeta todo el conjunto mediante el empleo de las varillas roscadas.
Y así surgieron estas dos piezas de colores tan pasteles y cucos.
Y éso es todo lo que puedo decir sobre este proyecto. Me trajo de cabeza al principio, pero de lo nuevo se aprende, ¿no? Aunque sea a copiar descaradamente a otros artistas. O versionar sus trabajos, que queda mucho mejor.
Nada más que añadir. Cambio y corto.
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